XV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
- Is 55, 10-11. La lluvia hace germinar la tierra.
- Sal 64. R. La semilla cayó en tierra buena, y dio fruto.
- Rom 8, 18-23. La creación, expectante, está aguardando la manifestación de los hijos de Dios.
- Mt 13, 1-23. Salió el sembrador a sembrar.
En la primera lectura se compara la lluvia, que hace germinar la
tierra, con la palabra que sale de la boca de Dios, que cumplirá
su deseo y llevará a cabo su encargo. Esa Palabra no es otra que
Jesucristo; y esa Palabra es la que se siembra mediante la predicación (Ev). ¿La escuchamos sin atención y no hacemos por
entenderla?, ¿la entendemos y profundizamos y somos constan-
tes en cumplirla?, ¿la escuchamos, pero ante cualquier dificultad
dejamos de cumplirla?, ¿la escuchamos, pero los afanes de la
vida, la preocupación por el dinero, nos llevan a olvidarla? A
medida que vivamos el mensaje evangélico iremos caminando
hacia la manifestación plena de la libertad gloriosa de los hijos
de Dios (2 Lect).
No hay comentarios:
Publicar un comentario