“…no me creáis a mí, creed a las obras…”
Buenos días Señor a Ti el primero. «…el Padre está en mí, y yo en el Padre…»
Señor… ¡Qué mal ambiente se respira! ¡Cuánta crispación! ¡Demasiada gente en contra de lo que dices y haces! ¿Y tus amigos? Señor, tus amigos casi no se atreven a hablar, sus miradas no se atreven a levantarse, bajo el peso de la preocupación, la tristeza, el desconcierto... Jesús te ve obligado a marchar al otro lado del Jordán. Habrías podido quedarte allí, incluso podrías haber huido por el desierto. Seguro que no faltó alguien que te aconsejó tomar ese camino. Señor Jesús ¡Cuánto pensarías y rezarías aquellos días! No sería fácil, incluso para ti, creer que el camino de la misión se adentraba en los territorios sombríos de la muerte. No era fácil… ni es fácil hoy. Pero fuiste fiel. Fiel al Padre, fiel a la humanidad, fiel a ti y a mí, fiel al que le ama y al que le aborrece. ¡¡¡Gracias por tu fidelidad!!
Padre, dame fuerza para ser fiel, para ser fiel como Jesús, tu hijo, para amar al que no lo merezca, para perdonar, aunque parezca inútil, para decir la verdad, aunque sea peligroso, para sembrar, aunque la tierra escupa la semilla, para crecer en bondad, aunque pocas veces lo consiga, para luchar por la justicia, aunque me critiquen, para defender la vida de los débiles, aunque nadie lo agradezca, para rezar cada día, aunque crea que pierdo el tiempo, para trabajar por la paz, aunque no me comprendan, para anunciar el Evangelio, aunque se me rían, para dar la vida de todo, aunque sea una locura. Gracias, Padre, por ayudarme a ser fiel, Gracias por convertir "el fracaso" de Jesús, en fuente de vida nueva para la humanidad. Gracias porque con nuestros esfuerzos "inútiles" construyes un mundo más justo y fraterno. Gracias porque ningún gesto de amor se pierde en tu Reino.
ORACIÓN CON MOTIVO DE LA PANDEMIA
En medio de la tempestad y el dolor,
- tenemos un ancla: en tu Cruz hemos sido salvados de la soledad
pues sabemos que Tú estás siempre a nuestro lado;
- tenemos un timón:
en tu Cruz hemos sido rescatados del miedo,
por tu Amor, más fuerte que nuestro peor enemigo;
- tenemos una esperanza:
tu Cruz es fuente de vida,
de vida fraterna y solidaria, de vida plena y eterna.
En medio del aislamiento, sufriendo la falta de los afectos y de los encuentros, experimentando la carencia de tantas cosas, Tú nos invitas a contemplar tus llagas gloriosas, a mirar más allá del sufrimiento y el cruz, a descubrirte resucitado, vivo y dador de vida, espabilando la llama vacilante de nuestro amor, guiando nuestra mirada hacia quienes nos necesitan, mostrándonos nuevas formas de hospitalidad y fraternidad, suscitando el deseo de cuidarnos mutuamente, sin exclusiones, liberando del miedo a quienes se juegan la salud y la vida, descubriéndonos tu presencia en nuestro corazón, abriéndonos a una esperanza más allá del dolor y la muerte, despertando el deseo de una vida plena, de una vida eterna. Amén.
Buenos días te doy. Si miro a tus ojos el Amor nos une en el Señor. Buenos días te doy.
¡¡Feliz Viernes nos de Dios!!
“…todo lo que Juan dijo de éste
era verdad…”
Señor dame fuerza y fe para llevar esto te necesito tanto AMEN
ResponderEliminarPreciosa oración. Amén.
ResponderEliminarBuen viernes también para ti, Manolo
¡Qué difícil serte fiel, Señor! ¡Ayúdame!
ResponderEliminarQué está Semana Santa tan especial que vamos a vivir, nos ayude en el camino de esa fidelidad.